Como una diosa...
Cual diosa griega en su versión afrodescendiente, ella irradia fuerza y divinidad. Su torso desnudo no es vulnerabilidad, sino un manifiesto de poder, una declaración de belleza inigualable y virtudes que trascienden el tiempo. Con la seguridad de quien conoce su esencia, desafía los límites, crece con la rapidez de un relámpago y esculpe con sus manos un mundo nuevo, más justo, más brillante, más suyo.













